Más allá del contexto global de crisis climática en el que vivimos y el papel de las plantas en el ciclo del carbono y sus efectos atmosféricos y climáticos, al que inevitablemente no podemos dejar de lado, para la construcción de nuestro jardín interior hemos tenido en cuenta que las atmósferas interiores tienen otros problemas derivados del paisaje artificial y sintético que habitamos.
Pinturas, plásticos, barnices… materiales que liberan al aire contaminantes nocivos, y de lo que eran muy conscientes los científicos de la NASA cuando empezaron sus aventuras espaciales. Por eso mismo, a finales de los años 80 del siglo XX la NASA investigó qué plantas eran capaces de eliminar estas sustancias nocivas de los aires interiores. En su estudio “Interior Lansdcape Plants for Indoor Air Pollution Abatement” del NASA Clean Air Study, se publicaron los resultados de estas especies.
Especies que hoy forman parte de la paleta botánica habitual de nuestras casas, y que han sido las elegidas para el Aula-Jardín: helechos, potos, hiedras, orquídeas, ficus o crisantemos (como los que revivió ET), entre otras.
Y un jardín que también ayude a mitigar los efectos del calentamiento global. Por eso hemos utilizado la fibra de coco como material de construcción de sus macetas y como sustrato para sus raíces. Un material rico en suberina (componente principal del corcho). Uno de los materiales estratégicos en algunas de las más innovadoras propuestas para volver a fijar carbono en la tierra (Suberine project. Salk institute).
Pero además cada alumno y alumna, tienen su maceta, y en ella una planta. Sus tótem. Partes de un mismo ecosistema interior que oxigena cuerpo y mente y les permite soñar con los lugares lejanos de los que proceden… y con el propio espacio, en el que hemos descubierto que también florecen.
Plantas que requieren cuidados y de un compromiso para mantener y hacer prosperar a cada una de sus nuevas compañeras de clase. Un ecosistema que les ayudará a aprender, a concentrarse, y a valorar la importancia de las especies como soporte de unas mejores condiciones de vida; al tiempo que han podido participar en la construcción de su propio aula y responsabilizarse de su cuidado.